Me siento intranquilo acerca de lo que en las últimas semanas se esta produciendo en nuestro país, a raíz del anuncio de la nueva ley que aprueba la venta en farmacias de la píldora del día después.
En los medios de comunicación se habla de que las niñas decidan que hacer con un posible niño de forma algo mas que a la ligera, en menos de 48 horas. Esas mismas niñas que si cometiesen algún robo, acto vandálico,… estarían protegidas por la ley ya que “no saben lo que hacen”. Esas mismas niñas que para realizarse un tatuaje necesitan una autorización de sus padres. Todo esto me parece una perfecta incoherencia y por eso me siento intranquilo. Les damos a los jóvenes una de las mayores responsabilidades, como es decidir si deseas que un posible niño en potencia nazca, y sin embargo no les dejamos hacerse un tatuaje.
Dejando aparte el tema de la edad y de la capacidad de decisión de los usuarios de estas pastillas nos adentramos en el tema de los efectos secundarios que estas presentan porque, aunque nuestra ministra nos lo oculte en sus discursos en pro de la (des)información, los tiene. Se trata de una descarga de hormonas que puede provocar trastornos cardiovasculares y hepáticos, ha estos se le suman los ya conocidos como son las nauseas, vómitos, dolor de cabeza, trastornos menstruales. Además, si el consumo de estas pastillas se hace mas continúo, podría dar lugar a ausencia de periodo menstrual, crecimiento inadecuado del endometrio o compromiso del sistema óseo.
Otro tema con respecto a la píldora del día después que merece la pena tratar tiene que ver con la campaña que viene realizando el gobierno de Zapatero para promocionar el mal llamado anticonceptivo de emergencia. Digo mal llamado porque este no es un método anticonceptivo sino un método abortivo ya que impide que el cigoto se implante en el útero pero una vez que se ha producido la concepción, con la consiguiente destrucción de un ser humano con ADN singular. En mi opinión esto no es más que un paso hacia el aborto libre tan anhelado por nuestro gobierno. ¿Será esta otra “política social” de Zapatero para paliar la crisis? Sería una “magnífica” idea por otra parte: como la gente no tiene dinero para poder cuidar a los hijos como ellos quisieran, que no tengan. Quizás no sea una magnífica idea para paliar la crisis pero, definitivamente, es una gran cortina de humo que oculta las deficiencias de nuestro gobierno mediante leyes que movilizan la opinión pública arrastrándola lejos del tema que de verdad les preocupa y les atañe. Esta capacidad de movilizar la opinión publica de un lado a otro, pero siempre lejos de donde no desean que este, es la mejor característica de nuestro gobierno
Con todo esto el número de abortos en clínicas descenderá pero a su vez aumentaran las mujeres que pudieron ser madres y que nunca sabrán como hubiera sida su vida si este hijo hubiera nacido. Es decir que además de los efectos secundarios físicos que se producirán en las personas que consuman estas pastillas, existe otra contraindicación, que es en mi opinión una de las más importantes, y es que, al someter a una adolescente-niña a una decisión de este calibre, la decisión que en ese momento le parezca la correcta, al adquirir madurez pueda producirle una carga psicológica inmensa que arrastre durante el resto de su vida.